Quizá por la frase de Bolívar ante el Congreso de Angostura (15/2/1819): "El sistema de gobierno más perfecto es aquel que produce la mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad social y mayor suma de estabilidad política", se pretenda tidarle de comunista. Criterio que, sin duda alguna, es ilógico. Pero, Bolívar era un hombre de su época, previsivo. Y, constituiría una necedad extrema asimilar su idea sobre seguridad social a lo que conlleva tal concepto, cuando sabemos que el promotor de la seguridad social fue el canciller alemán Otto von Bismarck (25/5/1883), quien buscaba paliar la problemática social que traería la industrialización vertiginosa que alcanzaría a su país.
Probablemente, las inquietudes sobre seguridad social del Libertador le hayan sido referidas por el nédico peruano, doctor José Hipólito Unanue, ministro de Hacienda, quien junto con San Martín, apoyó a Bolívar y ocupó la presidencia del consejo de ministros (1826-1827).
Difícilmente, Bolívar pudo haber oteado la doctrina socialista, pues había nacido unas tres décadas antes (7/1783) que Marx (5/1818), quien inicia Su tesis doctoral en 1839 y la expone en 1841 en la universidad de Bonn, cuando ya Bolívar no existía. Asimismo, el Manifiesto del Partido Comunista Marx/Engels (21/2/1848) tampoco estuvo cerca del Libertador.
A la luz de los conocimientos de hoy día, resulta necedad reiterada pensar que tanto Bolívar como Jesucristo, viviendo cada uno su momento histórico, de injusticias, fuesen, por su humanismo, comunistas, cuando más bien sus actitudes se aproximaron a la socialdemocracia, la cual postula que la transformación de la sociedad puede llevarse a cabo desde un parlamentarismo, pero jamás revolucionariamente.
(*) Exsecretario Sociedad Bolivariana de Venezuela, Caracas
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